Todos
los días 25 de cada mes en San Nicolás,
se convocó a un grupo voluntario de Misioneros de diversos lugares del país,
felizmente, por iniciativa de los propios laicos presentes en las reuniones,
fueron grabadas las charlas que se dieron. Hoy contamos con esta catequesis que
nos disponemos a ofrecer aquí a modo de entregas semanales para todos,
peregrinos en general y misioneros en particular.
MARÍA
CONVOCA AL MUNDO DESDE AQUÍ:
Pbro. Carlos A. Pérez
Zac 18,8 – Zac 10, 9
En este tiempo en que la Iglesia está llamada a un
nuevo esfuerzo de Evangelización. Las afirmaciones de la Escritura y sus
enseñanzas son un llamamiento apremiante a la conversión. La Virgen Santísima
de manera diáfana y constante, atrae a los hombres al conocimiento de la verdad
de Dios. La Madre, que ama entrañablemente a todos los hombres los conduce al
encuentro con el Salvador Jesús y con la Iglesia, convoca a todos. El llamado
es universal y la presencia de María se pone de manifiesto en sus Santuarios y
la Virgen que es modelo de santidad del laico, porque ella es plenamente laica
nos muestra en ella misma lo que quiere lograr en nosotros de parte de Jesús;
la santidad. El santo es verdaderamente amable, Cristo es la fuente de esa
amabilidad, amándolo y poniéndolo como motivo de amor es cómo podemos amar, con
amor verdadero a todos los hombres, particularmente a los menos amables. Es la
intención de la Virgen: recomponer en nosotros la capacidad de amor
profundamente deteriorada por el pecado, con esa fuerza persuasiva de Madre,
nos exige vivir la práctica de ese amor.
El amor de Dios es universal, abarca a todos los
hombres, a todos los tiempos, a todas las urgencias, a los que están cerca y a
los que están lejos. María encarna el querer de Dios, la voluntad de Dios y lo
hace en una actitud maternal de servicio a los hombres, sus hijos. Lucha para
que la Palabra sea escuchada, la conversión se produzca, las maldades se
rechacen y el materialismo sea neutralizado. La conversión supone luchar contra
toda forma de maldad. Es importante en estos momentos muy difíciles vivir en
las alturas, volar en las riquezas de Dios, tenemos que aferrarnos, gozarnos y
extasiarnos en esas grandes verdades. Este es el lugar elegido para esa lucha
que María incansablemente realiza para que podamos establecer nuevamente con
sólidos lazos, la Alianza entre Dios y nosotros su pueblo. Este es el lugar
elegido para la siembra de esa Palabra, por lo tanto el misionero de Ella desde
aquí imbuido de la palabra de Jesús y de María va por todas partes a sembrar.
Es propio de la Virgen misionar, tenemos que tener mucha conciencia y valorar
lo que nos enseña María desde aquí en San Nicolás adquirimos la claridad de
sentir que todo es gracia y entender que la Obra no es nuestra. Es fundamental
esta actitud en nuestra postura espiritual apostólica.
La acción misionera no es fácil porque para que
sea fecunda tiene que haber dolor, no hay redención ni fecundidad sin dolor.
Vivimos en el tiempo de María que es la profetiza de una hora de Gracia y de
triunfo para la Iglesia. El triunfo de su corazón anunciado en Fátima se va
haciendo misteriosa y palpable realidad en esta hora, San Nicolás es la nueva
Fátima mundial y María es la misma solo que elige un nuevo lugar. Dios elige
San Nicolás para recrear el mundo que está haciendo crisis entonces estamos
viviendo una visita de María muy especial que se hace experimentable en la
infinidad de gracias que incesantemente concede a todos aquellos que acuden a
su Santuario y a su imagen. La Virgen desde aquí ofrece ese gran cambio nacido en
Fátima como garantía de ese triunfo, y de una humanidad nueva, restaurada,
rehecha por la Gracia. Un Santuario nace con una espiritualidad y un carisma
propio por eso María desde San Nicolás nos hace adquirir una comprometida
mentalidad evangelizadora.
Mensaje 435: El Señor quiere que su
obra crezca, sed vosotros portadores, os lo pido hijos míos. Muchos se olvidan
que hay un Dios que espera poder entrar en ellos, os digo: Quiero que lleguéis
al corazón de mi Hijo. Bienaventurado el que se fortalece en el Señor. Alabado
sea.
Mensaje 772: Amados sean por Dios,
aquellos que siembran la palabra de Dios. Los sinceros y abiertos de corazón.
Los que se disponen a la voluntad del Señor. Los que no temen al enemigo. Los
que buscan el perdón de Dios. Los pueblos que creen en el Señor y se apegan a
la vida. Los que no rechazan a María del Rosario. Benditos mis hijos. Amén,
amén.
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